Storytelling inmobiliario

Desde siempre, las historias han sido parte de nuestra vida cotidiana. Aquellas que contaban los abuelos fueron transmitidas. A nuestros padres y éstos, a su vez, nos las contaban a nosotros.

Muchas de ellas no tienen registro escrito, como las historias de determinados sectores rurales. Aún así, perduran en el tiempo.

Seguramente recuerdas alguna en este momento ¿Cómo no hacerlo? Muchas veces estas mismas historias nos transportan a aquellas épocas. Es innegable el placer que se siente al contarlas o escucharlas.

Está demostrado que incluso el aprendizaje es mucho más sencillo usando este tipo de técnicas. 

¿Qué es el storytelling?


Consiste en una técnica de marketing digital cuya finalidad es utilizar las historias para conectar con una comunidad o audiencia. 

A pesar que su origen se encuentra en la época de las cavernas, Steve Jobs podría ser catalogado como uno de los principales exponentes de esta técnica. Desde entonces ha ganado mucho terreno en las redes sociales e Internet.

A diferencia del copywriting, el cual se centra en crear textos de venta, el storytelling busca mover las emociones de quien lee, buscando una conexión cercana con el mismo, tratando de acercarlo un poco más al proceso de compra o ayudándole a tomar una decisión.

Composición de una historia:


Si quieres conectar con el storytelling, lo primero que debes conocer son las partes de una historia o relato, con ellas podrás estructurar tu escrito de forma tal que pueda verse ordenado y coherente.

A continuación te explicamos las principales:

-Inicio: aquí explicamos el comienzo de todo, presentamos el o los personajes principales y describimos el entorno donde se desarrolla nuestra hostoria.

-Conflicto: aquí describimos el problema o las aventuras que tiene que pasar nuestro personaje y cómo les hace frente. Para esto podemos usar distintos recursos literarios como analogías o similes, metáforas o comparaciones que ayuden al lector a dibujarse una imagen en la mente.

-Desenlace: relatamos cómo nuestro personaje resuelve el o los conflictos de nuestra historia, dando fin a la misma y agregando un mensaje o una reflexión final.

Al momento de escribir un relato, estas son las partes principales, sin embargo, ya que el storytelling es una técnica de marketing, es necesario agregar algo más:

-Llamada a la acción: ninguna técnica de marketing está completa sin ella, y es que la llamada a la acción es el texto que termina de impulsar al lector a realizar algo en especial, como suscribirse a una lista de contactos, dejar un comentario, compartir el contenido o incluso, tomar una decisión de compra.

¿Cómo aplicar el storytelling en el sector inmobiliario?


Si bien el storytelling se puede aplicar a cualquier sector, es importante que la historia a contar sea coherente con el mensaje que quieres ofrecer, ya sea como marca personal o como empresa. Esto en cierta forma reduce las temáticas que se pueden abordar, sin embargo, aún hay muchos ámbitos de aplicación.

Por ejemplo, si estás proyectando una marca personal, contarle a tus seguidores de las redes sociales o visitantes de tu blog cómo llegaste hasta donde estás ahora, puede ser una gran forma de conectar con ellos.

También puedes emplear historias de cosas concretas que te hayan sucedido y mostrar cómo las resolviste y saliste airoso de las mismas. Desde el punto de vista de marca personal hay muchos temas que pueden abordarse, y que pueden conectar muchísimo con tus futuros clientes, ya que es una forma de humanizar ese rostro que ya conocen.

Incluso, si quieres aplicar como agente para alguna agencia inmobiliaria en concreto, aplicar storytelling en tu currículum puede ser una forma de conectar con tu reclutador y obtener ese puesto que tanto ansías.

Si por el contrario, eres una agencia inmobiliaria, contar la historia de tu empresa, puede ser una gran forma de conectar.

También puedes usar historias de tu equipo de trabajo, o anécdotas de cómo resolvieron algún conflicto interno o de los clientes mediante el trabajo en equipo.

Las historias de los clientes son aplicables tanto a las marcas personales como a las comerciales, pídeles que te cuenten cómo encontraron tu marca o agencia, qué cosas pasaron antes de que pudieras ayudarles, etc. 

Si vas a usar la historia de alguno de tus clientes, es importante que tengas su consentimiento, y si ya te lo dió, entonces envíasela al publicarla. No dudará en compartirla con sus contactos. Esto, es una forma de llegar a nuevos públicos y conectar con ellos.

Por último, también puedes usar personajes ficticios o animales para conectar con tu público. ¡Pon tu imaginación a volar y saca tus dotes de escritor!

¿Cuántas veces usar el storytelling?


La verdad, es que no existe una medida concreta o exacta de la cantidad de veces que puedes usarla en tu plan de contenidos. Puede que quieras que tu marca se caracterice por contar historias, muy al estilo de Coca Cola, o bien darlas como píldoras cada cierto tiempo.

Incluso, podrías crear una historieta con varios capítulos. Todo queda a tu creatividad.

Ejemplo de un storytelling para el sector inmobiliario:


Hace poco, nuestro director hizo una publicación en su blog, contando la historia de cómo conoció a su gatita Google, acá te la dejamos para que tengas un ejemplo claro y puedas inspirarte:

La historia de la gatita Google:

Durante mucho tiempo, la vimos en la calle. De aquí para allá y de allá para acá. De una casa a la otra.

Solía verla desde la ventana, echada en el frente de la casa del vecino. Los niños le hacían maldades, los adultos la espantaban. El vecino la corría cada vez que la veía.

No tenía nombre, era un simple gato de la calle. Es increíble cómo los seres humanos vivimos sin entender que todo es una conexión, que todo en este mundo tiene relación con nosotros, por pequeño que parezca.

Un día, compré sardinas. De camino a casa voy por las escaleras que dan a la entrada y nuevamente la veo donde el vecino. Intenté acariciarla pero no se dejaba, asumí que era porque tenía miedo de las personas.

Tal vez, porque la habían maltratado anteriormente.

Continué mi camino. Llegué a casa y me puse a limpiar el pescado.

Por alguna razón salí un momento al patio y allí estaba, típico de los gatos que hacen lo que quieren, cuando quieren.

Fue amor a primera vista. Corrí a la cocina y busqué una sardina para dársela. La puse en el suelo y ella no quería acercarse, así que para darle espacio, decidí entrar a casa nuevamente.

Comió y se fue. Cuando salí, no estaba afuera.

"Bueno, -me dije- al menos comió algo ese día, se notaba que estaba hambrienta." En un par de días no volvió y pensé que no lo haría.

Al tercer día regresó. En casa aún había pescado y decidí darle un poco más, esta vez se acercó y casi no se deja acariciar. Lo hice con suavidad, quería que entendiera que no la maltrataría.

Un par de días después, abrimos la puerta principal de la casa, estábamos limpiando y, en un descuido, había entrado en la cocina.

Yo aún no sabía su sexo. Simplemente le dije "bienvenido a casa". 

Resolvimos ponerle de nombre Google, porque su curiosidad era increíble. Quería saberlo todo de la casa y de nosotros. Nuevamente lo alimentamos y decidió irse, para volver un par de días despues.

Era bienvenido y queríamos que lo supiera. Esa noche durmió en casa y los días siguientes también. Nos dimos cuenta que era hembra al revisarle, estaba algo maltratada pero decidimos darle el amor que merecía.

Ya no volvió a irse, me seguía a todas partes, a las 3 am solía despertarme para que le abriera la puerta y al rato quería entrar de nuevo. Aún lo hace.

Incluso, en algunos videos en vivo que hice para Facebook, aparece. En las historias de la agencia ha aparecido también un par de veces. Es la consentida de la casa.

Han pasado más de dos años desde aquel día, Google tiene hoy dos gatitos y vive feliz. Encontró un hogar...

Y ahora te preguntarás ¿Cuál es la idea de esta historia?

Google eres tú, Google soy yo. Al igual que ella todos vamos por la vida, muchas veces a la deriva, buscando nuestro lugar en el mundo.

Google también es tu cliente, ese que tiene sus ilusiones en el futuro. 

Un futuro que no conoce.

Un futuro al que muchas veces teme por las experiencias anteriores.

Un futuro que como agente inmobiliario tienes en tus manos y al que lo puedes guiar, porque cuando te ofrece su confianza, pone en tí sus sueños, sus anhelos y sus esperanzas.

Estoy seguro de que los gatos también sufren, sueñan y aman, tal como lo hacemos nosotros.

¿Cuéntame, qué estás haciendo por el futuro de tus clientes? 

Resumiendo, es la historia de cómo un gatito de la calle, encontró una familia con la que actualmente vive feliz, en la que se hace una analogía con la vida del ser humano y cómo todos buscamos tener un hogar

Algunos consejos para que puedas crear tus propias historias:


1.- Encuentra un sitio tranquilo:


Escribir historias puede ser una tarea difícil al inicio, encontrar un sitio tranquilo te ayudará a encontrar la musa con mayor comodidad.

2.- Haz una lluvia de ideas: 


La lluvia de ideas te ayudará a seleccionar el tema, los personajes y el entorno a utilizar. Es un paso importante para poder comenzar.

3.- Selecciona las palabras clave:


Selecciona tres palabras que representen el inicio, el conflicto y el desenlace e intenta conectarlas entre sí. Esta técnica te ayudará a tener una guía de la historia que desees contar, además de identificar cada uno de los bloques que la compongan.

3.- Tómate tu tiempo:


Intenta hacerlo con calma y disfrutar el proceso, con la práctica verás como las cosas van fluyendo y se hará mucho más sencillo escribir. 

Ahora que ya tienes todas las herramientas para crear tus propias historias, nos encantará leerlas. Puedes enviar tu link a través del chat o de nuestro formulario de contacto.

Y si quieres aprender a crear historias para conectar con tus clientes, nuestras asesorías te ayudarán a desarrollar todo tu potencial.

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